sábado, 21 de septiembre de 2019

EL VOTO INÚTIL


Se denomina voto útil a la modalidad de decidir el voto ciudadano en función del eventual resultado de las elecciones. El «voto útil» concede máxima importancia a ganar la elección concentrando el voto, a la vez que busca evitar la dispersión del voto en varias alternativas. Se suele pedir de forma constante ante una posible amenaza del bloque contrario.

Debido al sistema electoral español basado en circunscripciones, siendo muy simplistas, suele dar más escaños la suma entre partidos de 8 y 4 millones de votos, que el reparto de 6.
En abril del 2019, en las elecciones generales, el fantasma de Vox movilizó a la izquierda. O dicho con propiedad, a los votantes del PSOE. Podemos perdió de nuevo más de un millón de votos.
Podemos cometió dos fallos. Uno de ellos aplaudido por todos. La moción de censura. Y otro criticado por todos, la alerta antifascista contra Vox.
El primero fue un acierto al fin y al cabo. Pero el segundo no. La visibilidad de Pedro Sánchez como presidente, sumado al voto útil, descabalgó a Podemos de la lucha por la Presidencia.

Pedro Sánchez por su parte engañó a todos. Le creyeron cuando antes de las elecciones hablaba de UP como un socio de verdad. Con acercamientos a sus políticas y con buena sintonía. Con lazos entre ellos para acabar con la irrupción de la ultraderecha. Sin manos invisibles que no se presentan a las elecciones tomando decisiones. Pero nada era lo que parecía.

El PSOE es de izquierdas en la campaña electoral. Pero es de derechas con la CEOE.
Es progresista en la campaña, pero conservador con el IBEX35.
Es socialista antes del cierre de los colegios electorales, pero el más rancio liberal frente a los poderes económicos del país.
A los representantes de UP elegidos en las urnas les escupe. A los no elegidos los besa.


Todo esto nos ha llevado a unas nuevas elecciones. El 10 de Noviembre de 2019 es el día elegido. Pase lo que pase en ellas, es un suicidio. Incluso aunque mejorarán los resultados por la izquierda. Estas elecciones es algo que los votantes no quieren.
El relato delata al PSOE. Pero también le delataba hace 3 años y todos los medios afines cambiaron la realidad. No importó que el propio Sánchez reconociera que poderes económicos y financieros apoyados por la prensa le impidieran pactar con Podemos. No importó que reconociera su error al no entender a Podemos entonces cegado por sus barones. Ahora no sabemos quien le tapa los ojos.

En los últimos tres meses se ha centrado más en buscar a Casado o Rivera que a Pablo Iglesias.
Casado es aquel que hace 6 meses le llamaba traidor, felón, incapaz, mediocre, mentiroso compulsivo, ilegítimo u okupa.
Rivera es aquel que le decía que era un separatista irresponsable y un enemigo de España que quería romper el país. Y le vacilaba en el Congreso sobre el plan Sánchez y la banda de sus socios.

Al otro lado está la derecha. El tripartito. Que aunque duda de las elecciones por su propia batalla de poder, va a tener otra oportunidad. Ellos tardarían 2 minutos en ponerse de acuerdo. Quizá exagero. Tardarían dos minutos en cerrar el Gobierno. Luego ya lo que venga.
Ellos gobernarían para todos. Para los que le votaron y para el resto de hijos de puta.

Da grima ver a Arrimadas, Cayetana o Abascal en algún Ministerio. Pero hoy hay que centrarse en el verdadero culpable de esta situación. El PSOE.


El PSOE no es de izquierdas. Hace décadas podría parecerlo ante la dictadura y después ante la derecha rancia que tenía enfrente. Pero ahora no cuela. No llega ni a izquierdita cobarde. Ni siquiera a izquierdita. Y todo esto lo demuestra.

1. Reforma del artículo 135 de la Constitución
En agosto de 2011, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy reformaron la Constitución para dar prioridad absoluta al pago de la deuda pública sobre cualquier otra cosa. ¿Qué diputado votó sí a semejante canallada? Entre muchos otros, Pedro Sánchez.

2. Políticas neoliberales
El PSOE ha venido llevando a cabo políticas neoliberales que muy poco tienen de socialistas. La SO hace tiempo que sobran en su nombre. Permite los privilegios fiscales a las sicav,apoyó el abaratamiento del despido a favor de la patronal, legalizó las Empresas de Trabajo Temporal… ¿Sigo?

3. Monarquía
Son tan de izquierdas, tan progresistas, que sostienen y defienden una de las instituciones más arcaicas del mundo, la monarquía. Dicen que son republicanos pero se sienten cómodos en una Monarquía Parlamentaria. Lo dicen sin moverse un pelo de la barba de Ábalos.

4. Iglesia
Esta institución comparte con la Monarquía lo de arcaica. Pero añade en mayor grado lo de retrógrada.
El PSOE siempre ha mantenido sus privilegios, con el dinero de todos. Con el PSOE comenzaron los conciertos educativos con la Iglesia Católica.

5. Recortes sociales
«A ningún presidente del Gobierno le gusta comparecer para anunciar recortes y a mí menos aún». Así, y poniendo cara de compungido, se presentaba Rodríguez Zapatero en mayo de 2010 en el Congreso para anunciar una reducción del salario de los funcionarios, una congelación de las pensiones, un recorte para el gasto de dependencia, para las ayudas a la paternidad, para la protección del desempleo, para la Sanidad… Suena a película de terror del Partido Popular, pero no.

6.  Privatizaciones
¿Cuántos altos cargos de la política tienen despacho propio en grandes empresas, antes nacionales, después privatizadas? ¿Quién privatizó o permitió la privatización de Repsol, Endesa o Telefónica

7. La banca
Desahucio, una palabra tristemente de moda. Un hecho terrible que destroza familias. Nunca visto como nunca problema grave para el PSOE.
Y la deuda. Lo de la devolución del dinero público destinado a la banca lo dejan siempre para la siguiente legislatura.

8. Inmigración
Basta ver los bandazos dados con el rescate de más de 100 migrantes del Open Arms para comprender que no tienen políticas pensadas ni consensuadas.

9. Pacto antiyihadista
La excusa perfecta para implantar la cadena perpetua en España. Una medida a la que el secretario general del PSOE dice oponerse. Pero ellos la aprobaron.
Fue la primera piedra de la ya famosa Prisión Permanente Revisable.

Y podría ser un no acabar.


El 10 de Noviembre de 2019 volveremos a votar. De cada uno depende votar al partido que considera lleva las mejores propuestas. Pero uno espera que nadie utilice el votó útil. Lo único que provoca es que quien lo recibe crea erróneamente que puede gobernar en solitario.
No hay nada más inútil que el voto útil.