sábado, 26 de septiembre de 2020

MARILYN MANSON - WE ARE CHAOS (2020)


Nada más salir el primer single We Are Chaos tuvimos la sensación que lo nuevo de Marilyn Manson podría ser interesante. Un single efectivo que pese a la bajada de revoluciones tenía clase. Y una producción limpia y exquisita que nos permitía disfrutar de cada instrumento.

No nos confundíamos. Bueno, solo un poco. We Are Chaos es un buen tema. Pero en la nueva referencia de Manson los encontramos mejores. Y esa gran producción está llena de magníficos arreglos en todos y cada uno de los temas.

Un aire bluesero, sureño y alternativo te atrapa durante todo el álbum. Que Manson se libere de las cadenas que le atan a su pasado puede ser bueno o malo. En Eat me, Drink Me (2007) fue un despropósito. Ni un aceptable The High End of Low (2009) pudo ponerle de nuevo en el candelero. Desde entonces, la nada.

Pero en 2020 tenemos a un Manson diferente. Como si llegara desde 2012, tras su mediocre Born Villain, entendiendo que la única flor de aquel álbum era la enorme The Gardener. Dispuesto a usar ese flow en su nueva obra.

Los temas convencen. Hasta Paint You with my Love agrada. Algo que en primeras escuchas parece difícil por ese inicio noña que dificulta el proceso de aceptación. Pero acaba seduciendo. Especialmente ese potente final que nos recuerda a Mechanical Animals.

Precisamente ocurre lo contrario con la inicial Red, Black and Blue. Su inicio prometedor acaba perdiéndose en el estribillo. Ni siquiera el imponente bajo salva los muebles. Pero aún en este punto, es un tema bien llevado con aprobado sobrado. Quizá este tema defina perfectamente al Manson actual. Perdido cuando busca la agresividad de antaño pero inspirado cuando nos regala temas más reflexivos y melódicos. 

Entre ellos cabe destacar el segundo single, Don´t Chase the Dead. Un tema adictivo de gran categoría. Melódico y accesible, algo que no será una excepción durante el álbum. El reverendo se mueve como pez en el agua en estos temas de rock alternativo desenfadado. El deje gótico siempre está ahí debido a su inconfundible voz. Pero el estilo y los registros son novedosos. Cierto que pulula un aroma a Mechanical Animals que le sienta de lujo.


Perfume o Solve Coagula pueden ser los dos tracks menos inspirados. Pero partimos de un nivel por encima de sus últimos trabajos. El disco se escucha completo de manera orgánica. Sin que nada rechine. Sin que nada sobre. No hay relleno.

Broken Needle nos traslada a la época Holywood, con una guitarra acústica que nos recuerda el enorme tema In The Shadow of the Valley of Death. De nuevo un tema efectivo que en épocas pasadas recientes habría echado a perder, pero que aquí sabe como moldearlo y finalizarlo.

Infinite Darkness y Keep My Head Together ponen el punto de intensidad. En esta última nos cuenta que Manson "come vidrio y escupe diamantes". Para diamante Half-Way & One Step Forward, un tema basado en una línea de piano totalmente envolvente. Voz y melodía van creciendo a lo largo del minutaje para cerrar el mejor tema del álbum.

Marilyn Manson no es el de los 90. Entre otras cosas porque en esa época era un treintañero y hoy es un cincuentón. Su gasolina ya no es súper. Pero si sabe utilizar la diésel como lo hace en este disco, seguramente nos sigan esperando grandes temas en el futuro.

Perdido desde hace tiempo, en We Are Chaos nos encontramos con un artista renacido. No llega a un sobresaliente porque incluso algunos buenos temas denotan falta de riesgo. Pero es un álbum con grandes momentos que desprende clase y calidad. De largo el mejor desde The Golden Age of Grotesque. Un disco que al contrario que sus últimas referencias, frías y repetitivas, rezuma calidez y una sensación hogareña que invita a escucharlo a todo volumen frente al calor de una buena chimenea. Juntar hogareño y Marilyn Manson debería ser un sacrilegio. Pero ojalá este nuevo personaje convertido en cantautor gótico rockero no sea solo pasajero. 

En Half-Way & One Step Forward nos canta que se encuentra "a mitad de camino y un paso adelante pasado el punto sin retorno". Eso ya lo sabia el reverendo hace décadas. Pero parece que por fin se ha dado cuenta. Si el nuevo camino es este, bienvenido sea.